Limpie el
protector térmico para remover cualquier tinta que podría afectar
la calidad de impresión. Necesita un destornillador de cruz para
retirar el protector térmico para limpiarlo.
Utilice
el destornillado para retirar los cuatro tornillos que fijan el
protector térmico y retírelo de la tapa del tanque de tinta.
Limpie
ambos lados del protector térmico con un paño suave ligeramente
humedecido con agua, según sea necesario.
Alinee
los orificios del protector térmico con los orificios de la tapa
del tanque de tinta. Luego, introduzca los tornillos y apriételos
con el destornillador para fijar la tapa.