Si el papel no se expulsa correctamente, pruebe estas
soluciones:
- Si el papel
no se expulsa completamente, es posible que haya seleccionado el
tamaño de papel incorrecto. Cancele la impresión para expulsar el
papel. Seleccione el tamaño de papel correcto cuando vuelva a
imprimir.
- Si el papel
sale arrugado, puede deberse a que esté húmedo o sea muy delgado.
Cargue una pila de papel nuevo.